Destaque - 05/02/2019

La experiencia del primer año de voto a distancia obligatorio para todas las compañías

Después del primer año de uso del voto a distancia por parte de todas las compañías categoría A con acciones negociadas, un relevamiento de B3 mostró que el quórum medio en las asambleas pasó del 71% en 2016 al 78% en 2018. De las 321 compañías que realizaron asambleas en 2018, todas aptas para recibir el voto a distancia, el 64% recibió votos vía boletín en sus diversas formas de envío.

Los datos fueron presentados en el taller de voto a distancia realizado por B3 y Lobo de Rizzo en São Paulo esta semana. Una novedad anunciada fue la interconexión del sistema de B3 (Central de Inteligencia Corporativa) con Empresas.net, que permitirá que la Compañía elabore y envíe el Boletín de Voto a Distancia a B3/CVM de una vez sola y directamente por el CI.CORP sin precisar imprimir el PDF del sistema, guardar como documento y entonces presentarlo en Empresas.net en la categoría del BdV.

Dicha medida debe evitar confusión de versiones, ya que algunas compañías enviaban vía sistema un documento y ponían a disposición en el sitio web una versión con ajustes, lo que muchas veces creaba conflicto en los votos recibidos vía empresa y vía registrador.

Es importante resaltar que el principal objetivo del boletín de voto es asegurar el derecho de los accionistas, sea éste ejercido personalmente en la asamblea o no. Es decir, quien votó con antelación no debe tener pérdida de información ni de decisión. Éste es el mindset que debe adoptarse en el momento de elaborar el boletín de voto, visto que pueden surgir muchas dudas en el proceso.

Además, la claridad de los datos divulgados en los mapas de voto debe ser asegurada por la compañía para que no haya conflicto de información entre lo que se votó en el mapa y lo que se contabilizó en D0 en la asamblea. Por lo tanto, no se indican cambios en el orden de las cuestiones, resúmenes ni exclusión de las respuestas.

En el último dato puesto a disposición después de la temporada de asambleas ordinarias de 2017, el 98% de los votos recibidos vía agente custodio/depositario -que representó aproximadamente dos tercios de los votos recibidos a distancia- fue de accionistas extranjeros, lo que muestra la importancia de la práctica del voto a distancia para aumentar el alcance del derecho del accionista y reforzar la gobernanza corporativa del mercado de capitales brasileño. Con una maduración de la práctica, tanto para los accionistas como para las áreas actuantes en el proceso dentro de las compañías, se espera que se amplíe la participación, así como la relevancia de los votos enviados a distancia.

Publicado por Cássio Rufino e Isabela Perez